Durante la cumbre los líderes del G-20 tratarán una agenda que incluye el crecimiento y economía global, inversión en crecimiento, creación de empleo, entre otros, y se espera que la reunión de San Petersburgo permita alcanzar importantes acuerdos para la economía y las finanzas globales a pesar de que el conflicto sirio se ha filtrado en la agenda.
Los participantes de la cita ya están llegando a la antigua capital imperial rusa, entre ellos los líderes de los tres países de Latinoamérica que forman parte del G-20: las presidentas de Brasil y Argentina, Dilma Rousseff y Cristina Fernández, respectivamente, y el mandatario mexicano, Enrique Peña Nieto.
Todo indica que las economías emergentes de América Latina, lideradas por Brasil, aprovecharán la cumbre para reiterar a los países desarrollados que sus intereses deben ser tenidos en cuenta.
"El escenario internacional exige del G-20 una mayor coordinación para recuperar el crecimiento económico y la creación de empleo no sólo en los países desarrollados, sino también en los países en desarrollo", dijo a la agencia Efe un miembro de la delegación brasileña a su llegada a San Petersburgo.
El asunto de última hora más caliente que deberán afrontar los asistentes a la cumbre y que más preocupa en la actualidad a las economías emergentes, en este caso a Brasil, Argentina y México, será la posible reducción de los estímulos monetarios en EEUU, en particular, la conclusión de la llamada flexibilización cuantitativa.
Es una medida de política monetaria que usan algunos bancos centrales, como es el caso de la Reserva Federal de EEUU, para inyectar dinero en la economía y estimular así su crecimiento.
Las economías en desarrollo temen que el fin de estos estímulos cause una fuerte fuga de capitales especulativos de sus países, que podrían ser agravados por un virtual encarecimiento del precio del dólar, y por consiguiente, esto influirá negativamente en el crecimiento de esas naciones.
En tal sentido se expresó en declaraciones a La Voz de Rusia el conocido economista argentino Luis Palma Cané:
—Yo diría que a partir de la fuga de capitales que ha habido en los últimos tres meses desde los países emergentes, básicamente hacia EEUU, por el famoso tema del retiro eventual de los estímulos monetarios de la FED, yo le diría que las perspectivas de crecimiento, Argentina con suerte va a crecer en 1,5 %, Brasil no más del dos, México, un 4-4,5 %, de manera que, evidentemente, estos países han desacelerado su crecimiento, mientras que Europa, por el contrario, está intentando tener tasas de crecimiento mayores. Están en ciclos inversos, claramente.
Si hablamos de Argentina, según un comunicado de la Presidencia, más allá de la agenda oficial de la cumbre del G-20 de San Petersburgo, la decisión argentina de reabrir el canje de deuda, y de la disputa con los fondos buitre, la necesidad de seguir adelante con la implementación de reformas en el sistema financiero internacional, la lucha contra los paraísos fiscales y la creación de empleo como herramienta central para enfrentar la crisis, serán algunos de los asuntos que abordará Cristina Fernández durante la reunión de los dirigentes de las veinte economías más avanzadas del mundo.
A menos de una hora de la llegada a San Petersburgo de la mandataria argentina, el embajador de ese país en Rusia, Juan Carlos Kréckler, comentó a nuestra emisora la importancia que concede Argentina a su participación en esta cumbre del G-20:
—Muchas gracias por llamarme. Precisamente en este momento estoy acá, en San Petersburgo, porque la presidenta está por llegar al aeropuerto de Púlkovo, está por llegar dentro de más o menos cuarenta y cinco minutos.
Bueno, la visita de nuestra presidenta acá, a este queridísimo país, es muy importante porque, como ustedes saben, va a participar en esta importantísima reunión del G-20, donde se van a tratar temas muy muy importantes sobre la política económica mundial, la falta de empleo en el mundo. Es decir, muchos presidentes de los veinte países más influyentes del mundo se darán cita aquí para tratar realmente de todos estos problemas económicos que son tan importantes para todo el mundo.
Y se añade el problema de Siria ahora...
—Sí, lógicamente, acá se van a tratar todos los problemas, para eso son estas reuniones. Como ustedes bien saben, todos los años se realiza la reunión del G-20, la Federación Rusa tiene ahora la presidencia y, por supuesto, es muy importante porque esto significa que los presidentes puedan dialogar sobre todos los temas de la actualidad internacional.
Así que yo considero que es una reunión fundamental y, además, muy bien elegida esta hermosa ciudad de San Petersburgo que está muy bien preparada para todo.
México llega a la cumbre del G-20 con una agenda propia que, además de alinearse con otras demandas de los emergentes, pone el dedo en la llaga de la pobreza y el hambre que padecen aún hoy, en pleno siglo XXI, amplias regiones del planeta.
Poco antes de partir de México a San Petersburgo, el presidente Enrique Peña Nieto confirmó en entrevista a la agencia rusa RIA-Nóvosti que la agenda para los debates en la cumbre del G-20, propuesta por el mandatario ruso, Vladímir Putin, es realmente de carácter social.
Según Peña Nieto, el crecimiento económico es de importancia crucial en la lucha contra la pobreza y el hambre, fenómenos que de una u otra manera aún están presentes en las economías en vías de desarrollo e inclusive desarrolladas.
El presidente mexicano se mostró convencido de que hay que dirigir los esfuerzos a la creación de nuevos puestos de trabajo y la confirmación del papel del comercio mundial como locomotora de desarrollo global.
Además de participar en los debates contemplados por la agenda oficial de la cumbre de de San Petersburgo, los tres presidentes latinoamericanos celebrarán reuniones de trabajo con Vladímir Putin que se centrarán en las relaciones bilaterales que mantiene Rusia con Argentina, Brasil y México.
Fuente:http://spanish.ruvr.ru/2013_09_04/Latinoamerica-en-la-cumbre-del-G-20-de-San-Petersburgo-0863/
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